La compañía de Roberto Nicolini más que una compañía teatral propiamente tal, correspondió a una productora de eventos que, a través del teatro infantil, shows masivos y la gira de grupos de teatro comercial de Santiago, se posesionó en la región como agencia de espectáculos de divertimento. Nicolini, nacido en Quilpue, fué un temprano admirador del arte dramático y a pesar de haberse formado sólo a través del oficio, destacó por su capacidad de comunicación masiva y de producción escénica, generando una gran afluencia de público en la ciudad de Viña del Mar. Su presencia como conductor y creador del programa infantil Pipiripao, transmitido por el Canal 4 de la Universidad Católica de Valparaíso entre 1984 y 1997, sirvió como plataforma para su desarrollo, pues al convertirse en una persona mediática, la gente pagaba por verlo en sus presentaciones en vivo.

Por otra parte, si bien Nicolini no era una persona afín a la dictadura, la neutralidad política de sus producciones y su opción por obras infantiles o de humor cotidiano, lo transformó en uno de los representantes del movimiento cultural de época, recibiendo una amplia cobertura mediática y apoyo del Municipio Viñamarino para sus proyectos y producciones. Ejemplo de ello fue la cesión de una sala exclusiva y gratuita para su grupo en el Palacio de la Quinta Rioja. Posteriormente, en 1985, Nicolini abrió su propio teatro en la calle 8 Norte de Viña del Mar, reestructurando locales comerciales ubicados en el subterráneo del Edificio Torres del Sol y transformándolos en tres pequeñas salas con capacidad entre 50 y 120 butacas, llamada Las Tablas. Desde allí generó un circuito teatral con fuerte presencia de compañías santiaguinas, las que contaban con convocantes actores televisivos dentro del elenco. A pesar de ello, en 1990 debió trasladar el teatro Las Tablas a un salón del Hotel San Martín, pues el arriendo de los locales comerciales se volvió insostenible. Desde allí continuó su producción espectacular hasta que el cambio político y la integración de nuevos creadores a la región fueron desperfilando su trabajo, desapareciendo de la Región como productora de espectáculos desde 1994.